PULIDO DE HORMIGÓN POR METROS AL MEJOR PRECIO
El precio para pulir el hormigón viejo o desgastado se ha convertido en una opción a considerar en el sector de la construcción antes de renovarlo por uno nuevo. La resistencia y acabado estético lo hacen apto para diversas aplicaciones, tanto residenciales como industriales.
Por supuesto el coste del trabajo varía en función del grosor de la losa, el tipo de acabado y la ubicación del proyecto.
Pulidores de hormigón, mejora tus suelos con profesionales expertos
El pulido de hormigón es un proceso que se utiliza para mejorar la superficie de los suelos de hormigón mediante diversas técnicas.
Un servicio profesional que le permitirá obtener un acabado liso en acabados brillantes o mate, aumentando la estética y funcionalidad del espacio.
Mejore su suelo y dótelo de durabilidad, resistencia y facilidad de mantenimiento gracias al pulido de hormigón, una opción económica y eficiente para diferentes entornos, desde residenciales hasta industriales.
Ventajas del Pulido de Hormigón
El pulido de hormigón se presenta con múltiples beneficios que lo convierten en una opción preferida en la construcción. A continuación, se detallan sus principales ventajas, que abarcan desde aspectos estéticos hasta el mantenimiento y la durabilidad.
Estética y Acabado
Una de las características más destacadas del hormigón pulido es su acabado brillante y atractivo. Este tipo de superficie no solo realza la luminosidad de los espacios, sino que también ofrece una apariencia moderna y sofisticada. El acabado se puede personalizar según las preferencias del cliente, permitiendo una variedad de tipos de pulido que se adaptan a diferentes estilos decorativos. Su capacidad para reflejar la luz hace que los entornos parezcan más amplios y acogedores.
Durabilidad y Resistencia
El hormigón pulido se caracteriza por su notable durabilidad. Este material puede soportar un alto tráfico de personas y maquinaria sin sufrir daños significativos. A diferencia de otras superficies, el hormigón pulido resiste abrasiones, impactos y desgaste, lo que prolonga su vida útil. Su robustez lo convierte en una elección ideal para entornos industriales y comerciales donde la resistencia es primordial.
Facilidad de Mantenimiento
El mantenimiento del hormigón pulido es relativamente sencillo. Su superficie lisa evita que la suciedad y el polvo se acumulen, lo que facilita la limpieza diaria. Se puede usar una fregadora o una simple mopa para mantener el suelo en buen estado sin necesidad de productos químicos abrasivos. Además, una correcta limpieza regular permite conservar su brillo y buena apariencia a lo largo del tiempo. Esto se traduce en un ahorro de tiempo y recursos en tareas de mantenimiento.
Eficiencia Lumínica y Energética
El hormigón pulido es eficaz en la gestión de la luz natural. Su acabado brillante refleja la luz, lo que puede reducir la necesidad de iluminación artificial en interiores. Esto no solo mejora la calidad de la luz en los espacios, sino que también contribuye a un ahorro energético significativo. Con un diseño adecuado, el uso de hormigón pulido puede llevar a un entorno más sostenible y económico a largo plazo.
Propiedades Antideslizantes
A pesar de su pulido, esta superficie puede ser tratada para garantizar propiedades antideslizantes. Esto es fundamental en entornos comerciales e industriales donde la seguridad es una preocupación. Se pueden aplicar tratamientos especiales que permiten que el hormigón pulido mantenga una buena tracción, reduciendo el riesgo de accidentes y caídas.
Costo-Efectividad
Desde una perspectiva económica, el hormigón pulido se presenta como una opción costo-efectiva. Aunque la inversión inicial puede ser más alta que otros tipos de pavimentos, su duración y bajo mantenimiento aseguran que a largo plazo se reduzcan los costos operativos. La combinación de durabilidad y facilidad de conservación convierte al hormigón pulido en una opción rentable para viviendas y negocios.
Herramientas y Equipos Utilizados
Las herramientas y equipos son cruciales para realizar un pulido eficaz del hormigón. La elección del equipo adecuado influye directamente en la calidad del acabado final y en la velocidad del proceso.
- Máquinas de Pulido: Se utilizan pulidoras de hormigón que pueden ser de tipo portátil o de gran tamaño. Estas máquinas están equipadas con discos abrasivos que van puliendo la superficie mediante rotación.
- Discos Abrasivos: Los discos vienen en diferentes granos, que varían desde gruesos hasta finos. La elección del grano depende de la etapa del pulido y del acabado deseado.
- Fregadoras Industriales: Para la limpieza inicial de la superficie, estas máquinas son esenciales para garantizar que no haya suciedad o residuos antes de comenzar el pulido.
- Densificadores: Se aplican para mejorar la resistencia del hormigón, y asegurar que el acabado se mantenga por más tiempo.
- Selladores: Utilizados al final del proceso para proteger el suelo pulido de manchas y daños, mejorando su durabilidad.
Componentes y áridos del hormigón
Los componentes del hormigón industrial son cemento agua y áridos, que también se suele llamar china de rio, en algunos casos el árido suele ser bastante grande quedando el pavimento o suelo mas bonito si cabe para su posterior mantenimiento.
Otros componentes que suele tener el hormigón son aditivos, fibras y pigmentos. Estos últimos esenciales en el proceso de abrillantado y calidad de la superficie del mismo, dando como resultado un mejor trabajo.
Los áridos pueden ser también piedras calizas machacadas para la durabilidad del hormigón, son mejores los áridos silícios que proceden de la trituración de rocas volcánicas o calizas y luego el árido mas fino se compone de arena de rio que suelen tener cuarzo con mucha pureza. El árido cuyo tamaño es superior a 5 mm. se llama árido grueso o grava y el árido que sea inferior a 5 mm. se le llamará árido fino o arena.
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Especialmente el pulido de hormigón en Madrid y Valencia han sido fundamentales para el despegue de nuestra empresa, ya que nos ha permitido trabajar y prestar servicio para las constructoras mas importantes del país.
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¿Deseas conocer mas datos sobre el pulido de hormigón?
Expliquemos primero entonces cuando es necesario pulir el hormigón
El pulido de hormigón es un proceso que transforma superficies de hormigón, dándoles un acabado liso y brillante. Este tipo de tratamiento se realiza mediante la utilización de maquinaria especializada equipada con discos abrasivos, generalmente de diamante, que permiten alisar y abrillantar la superficie, no solo se centra en la estética, sino que también mejora la funcionalidad del suelo y la técnica da como resultado un pavimento que puede soportar altos niveles de tráfico tanto de personas como de transporte industrial, siendo idóneo para diversas aplicaciones, desde entornos comerciales hasta residenciales.
El pulido de hormigón se destaca entre otras opciones del pavimento tradicional por sus características distintivas, que aportan múltiples ventajas. Entre los más notables se encuentran la resistencia a desgaste y la facilidad de mantenimiento, aspectos que contribuyen al atractivo de este acabado en el ámbito de la construcción moderna.
El proceso puede ser adaptado a las necesidades específicas de cada superficie, lo que permite obtener resultados óptimos en diferentes contextos. La versatilidad del pulido de hormigón lo convierte en una elección acertada para muchos proyectos de construcción, contribuyendo a la mejora de espacios tanto en funcionalidad como en estética.
¡Ahora que ya conoces de que se trata esto de pulir el hormigón es hora de decidir si tu suelo lo necesita o no!
¿Cómo pulimos el suelo de hormigón?
El pulido de hormigón es un proceso meticuloso que requiere atención en cada etapa para garantizar un acabado de alta calidad. A continuación, se detallan los pasos necesarios para llevar a cabo esta técnica eficazmente.
Preparación de la Superficie
La preparación adecuada de la superficie es fundamental para asegurar que el resultado final sea óptimo. Este paso involucra varias acciones previas al proceso de pulido.
Limpieza Inicial
Antes de proceder con el pulido, es esencial limpiar a fondo el suelo. Esto implica la eliminación de polvo, grasa y cualquier otra suciedad que pueda afectar el acabado. Para esta tarea, se recomienda utilizar una fregadora industrial que facilite la limpieza, o bien, una mopa húmeda con productos adecuados para disolver manchas. En caso de encontrarse con manchas difíciles, pueden emplearse soluciones detergentes como el peróxido de hidrógeno o amoníaco, teniendo siempre en cuenta las medidas de seguridad necesarias.
Evaluación del Hormigón
Una vez la superficie esté limpia, se procede a evaluar la dureza del hormigón mediante el test de Mohs. Esta evaluación es clave para determinar el tipo de abrasivo y técnicas que se utilizarán durante el pulido. Se clasifica el hormigón en blando, medio o duro, lo cual influye en la elección de los discos abrasivos a utilizar posteriormente.
Reparación de Imperfecciones
Antes de iniciar el proceso de pulido, es vital reparar cualquier imperfección en la superficie del hormigón. Las grietas, juntas y desperfectos deben ser tratados con un mortero especializado diseñado para este tipo de material. Se debe seguir al pie de la letra las instrucciones del fabricante y asegurarse de que el mortero utilizado está completamente seco antes de continuar con el pulido.
Desbastado Inicial
Con el suelo preparado y las imperfecciones reparadas, es hora de comenzar el desbastado inicial. Este proceso se realiza utilizando discos abrasivos de grano grueso, que permiten eliminar las irregularidades más pronunciadas y cualquier recubrimiento previo que pudiera afectar el acabado. Es un paso crucial que sienta las bases para el pulido posterior, dejando la superficie más uniforme.
Pulido Progresivo
El pulido progresivo es el siguiente paso, donde se utilizan discos de grano cada vez más fino. Este procedimiento puede realizarse en seco o en húmedo; el método en húmedo se prefiere en muchos casos, ya que reduce la cantidad de polvo generado. El objetivo es lograr un acabado suave y brillante a medida que se van utilizando discos de grano más fino, lo que permite lograr la estética deseada.
Aplicación de Densificadores
La aplicación de densificadores es un paso que ayuda a mejorar la resistencia y durabilidad del hormigón pulido. Los densificadores penetran en la superficie del hormigón, reforzándolo y minimizando su capacidad de absorción. Esto es esencial para mantener la calidad del pavimento a lo largo del tiempo.
Tipos de Densificadores
- Densificadores a base de silicato: Ayudan a sellar la superficie y previenen la humedad.
- Densificadores a base de polímeros: Proporcionan una capa adicional de protección y resistencia.
- Densificadores a base de resinas: Ofrecen una terminación más sólida y resistencias variables según el producto.
Métodos de Aplicación
La forma de aplicar los densificadores puede variar. Por lo general, se utilizan herramientas como rociadores o rodillos. Los densificadores deben aplicarse de manera uniforme y permitir el tiempo suficiente para que el producto cure y penetre en el hormigón antes de realizar el siguiente paso.
Sellado Final
El sellado final es la etapa que culmina el proceso de pulido. Una vez que el hormigón ha sido pulido y los densificadores aplicados, se utiliza un sellador especializado para proteger la superficie y darle un acabado brillante. Este sellador actúa como una barrera contra líquidos y manchas, y su correcta aplicación es crucial para garantizar la longevidad del pavimento pulido.